Los puntos rojos en las piernas pueden aparecer por diversos motivos, si bien es cierto que es más frecuente que con el paso de los años estas pequeñas marcas sean más proclives a mostrarse en nuestra piel. No son solo exclusivos de las piernas, ya que pueden aparecer en diferentes partes del cuerpo. Te contamos qué son y qué causas esconde su aparición.
¿Qué son esos puntos rojos en las piernas?
De forma general, podemos decir que existen diversos tipos de puntos rojos. Por un lado, están aquellos que son producidos por diversas causas orgánicas que explicaremos a continuación. Por otro lado, existen puntos rojos que aparecen tras la depilación, la llamada foliculitis. Estos se reconocen fácilmente porque, más que puntitos rojos, son pequeñas manchas sin contorno definido.
Petequias o puntos rojos por causas orgánicas
Este tipo de puntos rojos se llaman petequias, y pueden salir en cualquier parte del cuerpo. Los identificarás fácilmente porque tienen el tamaño de una cabeza de alfiler, y son de un color rojo intenso, si bien este puede variar hacia morado o incluso negro.
Se suelen producir por una rotura de los capilares bajo la piel, y a diferencia de los hematomas, no se vuelven de color blanco cuando los presionas. Entre las causas orgánicas que los provocan están las siguientes:
- Un excesivo y prolongado esfuerzo físico. Es la principal causa de las petequias tras el parto, en el que la mujer puede presentar estos puntos rojos en cara y pecho.
- Sufrir trombocitopenia. Esta afección implica unos niveles muy bajos de plaquetas, por lo que se producen las microhemorragias.
- Medicamentos. Algunos producen reacciones alérgicas con petequias . Pueden aparecer tras la ingesta de aspirina, quinina, atropina, naproxeno, indometacina y heparina, además de cualquier otro fármaco al que se sea alérgico.
- Quemaduras solares.
- Sepsis. Así se llama la respuesta del cuerpo ante un proceso infeccioso. Ante esta situación, disminuyen las plaquetas y se generan puntos rojos.
- Enfermedades de tipo autoinmune. La artritis o el lupus pueden tener entre sus síntomas la aparición de puntos rojos en la piel.
- Deficiencias nutricionales. La falta de vitamina C, vitamina K o vitaminas del grupo B puede desencadenar la presencia de petequias.
- Infecciones de garganta y enfermedades bacterianas como la escarlatina.
Por tanto, es un síntoma que de producirse es conveniente que se acuda al médico para su valoración, ya que puede ser originado por enfermedades más importantes. Una vez descartado un origen perjudicial para la salud, se podrán tratar únicamente por cuestiones estéticas.
Puntos rojos en las piernas derivados de la depilación: la foliculitis
Estos puntos se deben a la inflamación del folículo piloso tras la extracción del vello y aparecen en las pieles más sensibles. Suelen estar presentes en ingles y piernas, aunque ninguna zona está libre de su aparición.
Cuando aparecen estos puntos rojos con frecuencia es mejor consultar a un médico o especialista para determinar bien la causa antes de proceder o continuar con el tratamiento. Dra. Lorena Arrien Álvarez, cirujana en Medicina Estética.
Habitualmente, en una misma persona, pueden manifestarse en las zonas más sensibles quedando otras libres de puntos rojos. En el caso de que no exista ningún problema subyacente, lo habitual es que estos puntos desaparezcan en torno a las 24 horas tras la depilación, por eso es recomendable realizar unos cuidados para evitar la foliculitis tras la depilación.
¿Qué hacer cuando aparecen a causa de la depilación?
Si se desconoce la causa es mejor acudir al médico y consultarlo. Y si se producen tras la depilación se deben tomar ciertas medidas de precaución para contener su aparición:
- ¿Qué tipo de depilación provoca la foliculitis? Una vez que sepas qué método provoca esos puntos rojos, podrás optar por una forma de depilación menos agresiva para esa piel. El láser es la mejor alternativa.
- Limpiar, exfoliar y secar la piel antes de la depilación. La exfoliación nunca debe ser agresiva y se realizará días antes de la depilación con cremas específicas que contengan ácido salicílico, glicólico o azelaico.
- Depilación con cuchilla. Este método es bastante agresivo con la piel. Para evitar daños, nunca pases dos veces la cuchilla por la misma zona y cámbiala con frecuencia. Un error habitual es no poner crema depilatoria para el rasurado.
- Depilación con cera. Si optas por este método, asegúrate de que la temperatura es la correcta, porque el exceso de calor irrita la piel. Antes de aplicarla por completo, echa un poco de cera en el dorso de la mano para comprobar que es soportable.
- No administrar lociones o cremas. Este punto es importante antes de la depilación con cera. La cera no podrá hacer su efecto depilatorio y los folículos pilosos se cerrarán, inflamándose después.
Los puntos rojos nos pueden indicar la presencia de alteraciones vasculares o alérgicas. Por este motivo es tan importante que el médico haga una valoración previa, establezca un diagnóstico y recomiende el tratamiento más acorde para estas pequeñas manchas rojas.