Una mala circulación sanguínea en los pies puede manifestarse en las personas con síntomas como sensación de hormigueo, de frío o de hinchazón en las extremidades inferiores. Este trastorno es frecuente en todo tipo de personas, tanto en jóvenes como de más avanzada edad.
Causas de la mala circulación en los pies
Además del componente hereditario, existen varias causas de riesgo que favorecen la enfermedad.
- Hábitos perjudiciales: son hábitos negativos el sedentarismo, estar mucho tiempo de pie o sentado, el consumo de alcohol, el tabaquismo y una dieta rica en grasas saturadas.
- Colesterol alto: la sustancia cerosa del colesterol alto provoca un mal funcionamiento de las paredes de las venas. Además, si la presión arterial es elevada, el problema se agrava.
- Sobrepeso y obesidad: el sobrepeso y la obesidad causan una deficiente circulación sanguínea.
- Estrés: la mala gestión de las emociones reduce la circulación sanguínea.
- Herencia genética: el componente genético principal de la mala circulación está relacionado con la coagulación de la sangre.
Ocho consejos para mejorar la circulación sanguínea en los pies
Existen formas sencillas de mejorar los problemas de circulación de la sangre y la calidad de vida.
1. Vida activa
El estilo de vida es muy importante y la clave principal es evitar el sedentarismo. Los paseos y el deporte activan la circulación de la sangre en los pies. Los ejercicios más indicados son caminar todos los días, andar unos minutos de puntillas y alzar las piernas.
2. Hidratar el cuerpo
El organismo humano está constituido por un 70% de agua, dentro de las células y como componente mayoritario de la sangre. Por ello, consumir 2 litros de agua diarios es suficiente para gozar de buena salud y mejorar la circulación de la sangre en los pies.
3. Cambios de postura
Cambiar de postura, contraer los pies repetidas veces, masajearlos y usar reposapiés previene muchos problemas circulatorios. Una de las posturas que más perjudican a la salud es cruzar las piernas, ya que aumenta la presión de la sangre. Además, favorece el desarrollo de venas varicosas.
4. Calzado apropiado
La mala circulación sanguínea puede mejorar notablemente con el uso de zapatos cómodos sin tacón, que transpiren y sean holgados.
5. Plantas medicinales
Usadas desde tiempos inmemoriales, las plantas medicinales como el ginkgo biloba, la cola de caballo, la cúrcuma, la uña de gato y el jengibre alivian la pesadez en los pies. Estas plantas tienen gran potencial antiinflamatorio y reducen la retención de líquidos en el cuerpo.
6. Calor directo
El calor dirigido a los pies dilata las venas y dificulta el retorno de la sangre. Por tanto, no es recomendable calentar los pies cerca de un radiador o estufa, es mejor abrigarlos con un calcetín apropiado.
7. Medias de descanso
Las medias de compresión sirven para disminuir la circulación colateral y para que la sangre no se acumule por gravedad en las piernas. El grado de compresión debe ser indicado por un profesional.
8. Alimentos perjudiciales
Para mejorar la circulación de la sangre en los pies se recomienda evitar los siguientes alimentos:
- Los snacks
- La mayonesa y el ketchup
- Dulces que no sean dietéticos
- Las frituras
- Las harinas blancas
La mala circulación sanguínea en los pies es un problema que deteriora la salud del organismo. Por ello, es importante tratar los síntomas a tiempo para mejorar la calidad de vida.