Tras el merecido descanso del verano, no solo te enfrentas a la vuelta a la rutina. Es probable que el relax y el cambio de hábitos se traduzcan en una subida de peso. Sin agobios, ni frustraciones, te dejamos esta guía práctica sobre cómo perder los kilos de las vacaciones. Nada de fórmulas mágicas, ni medidas que pongan en riesgo tu salud. Son consejos saludables y que debe supervisar siempre un especialista en nutrición. Porque lo importante es recuperar tu silueta y que el cambio sea permanente.
Cómo perder los kilos ganados en las vacaciones en 10 claves
Puede que no entiendas por qué has cogido peso este verano. No recuerdas grandes comidas copiosas, ya que con el calor no apetecen demasiado. Pero seguro que sí te has prodigado en picoteos acompañados de bebidas refrescantes. Todo ello aumenta la ingesta de sal y, como consecuencia, la retención de líquidos. Así que si quieres saber cómo perder los kilos de las vacaciones, estas recomendaciones te serán muy útiles porque van enfocadas a atajar justo este problema.
1. Camina mucho
¿Has hecho mucho ejercicio en vacaciones? Probablemente, tu vida estas semanas ha sido más sedentaria. No te pedimos que pases de un extremo al otro de repente. Es más eficaz que incorpores la actividad física de forma progresiva, porque así es más fácil que seas constante. Puedes empezar con un paseo diario de una media hora e ir aumentando progresivamente. Eso sí, debes caminar a una velocidad que te suponga un esfuerzo.
2. Restringe los hidratos de carbono solo por la mañana
Los hidratos de carbono son esenciales para la nutrición humana, ya que son una fuente de energía indispensable. Pero si quieres perder algunos kilos, tienes que reducir su ingesta, y la hora de consumirlos es determinante. Por la noche, el cuerpo está descansando y esa energía se acumula, así que evítalos. Mientras que los hidratos de carbono en el desayuno o la comida se consumen con la actividad que realizas el resto del día.
3. Un café al día (si tomas café)
Salvo que seas de esas personas que no soportan el café, esta bebida puede ser uno de tus aliados para perder los kilos ganados en vacaciones. Y es que los antioxidantes del café ayudan a perder peso. Eso sí, con una importante limitación: debes tomar café solo, nada de acompañarlo con leche o azúcar.
4. Deja a un lado la sal y los aderezos
Ya hemos comentado que las vacaciones son el marco perfecto para aumentar el consumo de snacks y aperitivos con un alto contenido en sal. Ahora toca rebajar la cantidad de sal y de otros aderezos que te hacen retener líquidos. La medida ideal, una cucharadita de sal a repartir durante todo el día.
5. Infusiones drenantes para empezar el día y mucha agua
Insistimos con la necesidad de rebajar la sensación de inflamación, consecuencia de la retención de líquidos. Uno de los mecanismos más eficaces es tomar infusiones drenantes. Realmente funcionan y hay una gran variedad donde elegir, para que no te acabes aburriendo. Entre esas opciones: cola de caballo, alcachofa o un delicioso té verde.
6. Encurtidos para picotear entre horas
Queremos que esta propuesta no te suponga un sacrificio insoportable. Por eso, en este plan está permitido el picoteo entre horas. Eso sí, con opciones saludables. La mejor opción, los encurtidos y las crudités de verduras, que son absoluta tendencia.
7. Caldos de verdura y muchos yogures
Dos pilares de tu alimentación durante este proceso de pérdida de kilos son los yogures y los caldos de verdura. Los yogures, por supuesto, naturales y sin azúcar. Ayudan a tu salud intestinal, son saciantes y ligeros. Puedes tomar hasta tres al día.
En cuanto a los caldos de verdura, son un aporte de agua, pero con vitaminas y otros nutrientes esenciales para la salud. Suponen la cena perfecta o como primer plato al mediodía.
8. Legumbres en conserva: las aliadas para comer bien con poco esfuerzo
La excusa de falta de tiempo o de que no te gusta la cocina no te va a servir de nada en esta ocasión. Las legumbres en conserva son un recurso perfecto para comer sano y te ayudan a perder peso seguro. Puedes usarlas en todo tipo de ensaladas o hacer un rehogado con una cucharadita de aceite si prefieres un plato caliente. Solo tienes que tener la precaución de vaciar el líquido y aclararlas con agua, ya que suele tener un alto contenido en sal.
9. Consume alimentos con calorías negativas
Existe un grupo de alimentos que aportan calorías negativas al organismo. Es decir, no aportan calorías, y además te limpian. ¿Cuáles son? Pues el tomate, el apio, el rábano, la zanahoria, las manzanas, el calabacín o el pepino, entre otros.
10. Mucho descanso, fuera estrés y adaptación psicológica al cambio
Finalmente, un poco de atención a la mente. La vuelta de vacaciones implica un punto de ansiedad y de estrés. Necesitas un tiempo para incorporarte a tus rutinas. Intenta establecer un plan y organizarte todo lo posible. Y descansa. El sueño influye en la pérdida o aumento de peso.
Si estabas preocupado por cómo perder los kilos de las vacaciones, te hemos demostrado que se puede establecer un plan razonable que puedes seguir con cierta comodidad y de forma saludable. Es imprescindible un asesoramiento profesional, como el que te ofrecemos en Hedonai.