La piel de nuestro rostro es la que está más expuesta al clima, la contaminación y otros agentes externos que la resecan y la dañan. Aunque tengamos una rutina de limpieza, los beneficios de la limpieza facial profesional serán mucho más eficaces y duraderos, ya que gracias a esta se puede devolver a la piel la vitalidad y el brillo que había perdido.
Esto no se logrará en casa con solo agua y jabón, ni siquiera con el mejor limpiador que conozcas. Los resultados profesionales harán maravillas en tu piel y posiblemente nunca la hayas visto tan sana, rejuvenecida y llena de vida como después de una limpieza profesional profunda.
7 beneficios de la limpieza facial que debes conocer
La limpieza facial profunda se lleva a cabo por profesionales tras evaluar tu piel y elegir los productos más adecuados para ella. También te recomendarán algunos productos y pasos a seguir para realizar un mantenimiento en casa y que los resultados sean más duraderos. Lo aconsejable es que este tipo de limpieza profesional la hagas como mínimo una vez al mes para mantener la piel sana y luminosa.
La limpieza facial profunda consiste en un tratamiento profesional que descongestiona, extrae y elimina los puntos negros y las células muertas de la piel. Con esto se consigue que la piel respire mejor y absorba los nutrientes de todos los tratamientos de cosmética o medicina estética.
Se trata de un complemento a la limpieza facial diaria que se debe realizar en el hogar, tanto a la mañana como a la noche. Y es que es necesario eliminar las impurezas que se acumulan en un nivel más profundo de la piel. Para conseguir esto es imprescindible una limpieza facial profesional. ¿Cuáles son sus beneficios?
Elimina las impurezas y células muertas
Las células muertas, así como las impurezas, se acumulan en la superficie de la piel y se adentran en capas más profundas de la dermis a través de los poros, por lo que una limpieza superficial no será suficiente para terminar con ellas por completo. ¿Qué puede conllevar esto?
El envejecimiento prematuro, la falta de oxigenación en la piel (pues provocan el cierre de los poros), la aparición de arrugas o la falta de tersura y luminosidad son algunas de las consecuencias de no tener una piel bien limpia en profundidad. Para recuperar la belleza natural de la piel y mantenerla lo más sana posible, es necesaria una limpieza facial profesional.
Ayuda a combatir los puntos negros
Los puntos negros son consecuencia de una acumulación de suciedad provocada por la polución y otros agentes externos. Cuando con una limpieza superficial no se elimina por completo, esta se acumula y llena los poros evitando que puedan ‘respirar’.
Con una limpieza facial profesional la suciedad acumulada se elimina por completo y la piel retoma su tonalidad y brillo natural.
Suaviza e hidrata la piel
Cuando la piel está limpia en profundidad esta se vuelve más tersa, suave y agradable al tacto. Por el contrario, con las impurezas e imperfecciones, la piel se torna rugosa, seca e incluso escamosa.
Regula el pH
El pH de nuestra piel depende de su salubridad. Por tanto, cuando la piel tiene impurezas, el pH se descontrola y se desnivela. Entre los beneficios de la limpieza facial está la regulación del pH, la cual es muy importante para mantener el buen estado de la piel tanto por dentro como por fuera.
Aumenta la luminosidad del rostro
La luminosidad de la piel del rostro se ve atenuada precisamente por la falta de oxigenación. Esta aparece cuando los poros, que son los encargados de que la piel respire, se cierran. Es entonces cuando la piel no puede oxigenarse, por lo que tampoco serán eficaces los productos cosméticos que utilices.
Cuando se obtienen los beneficios de la limpieza facial, estos se desaturan, permitiendo que se oxigene la piel desde el interior.
Regula el sebo y controla el acné
Un exceso de sebo está provocado por cambios hormonales, productos no adecuados u otras causas. La limpieza profesional regulará este exceso y con ello se evita la aparición de acné, entre otros problemas relacionados.
Retrasa el envejecimiento y la aparición de arrugas
Cuando la piel está sucia y se mantiene así en el tiempo esta se reseca, la producción de colágeno se detiene o ralentiza y las arrugas comienzan a aparecer. Todo ello porque esta suciedad impide la oxigenación de la piel, la cual es vital para su salud y su buen aspecto exterior.
En definitiva una limpieza facial purificante es un tratamiento profesional que elimina la suciedad de manera más profunda y, además, trata la hidratación de la piel. Los productos utilizados contienen concentraciones muy altas de principios activos y nutrientes, lo cual permite conseguir unos grandes resultados.