Las telangiectasias en la cara, al igual que en otras partes del cuerpo, son dilataciones de pequeños vasos sanguíneos en la piel. Por lo general no dan síntomas ni son graves, aunque pueden estar relacionadas con algunas patologías. En la mayor parte de los casos, el problema y el tratamiento son estéticos. Determinaremos sus posibles causas y las diferentes técnicas existentes para reducir estas arañitas vasculares.
Telangiectasias en la cara: causas y diagnóstico
Estas lesiones vasculares son consecuencia de la presión arterial. Frecuentemente presentan una coloración rojiza, se distribuyen en forma de árbol y son muy habituales en nariz, mejillas y mentón. A veces pueden adoptar una coloración azulada pero es menos común. El paciente modelo para este tipo de problemas es una mujer en edad adulta con cierto sobrepeso y consumo de anticonceptivos. Existen diferentes causas, entre las más frecuentes se encuentran:
- Antecedentes familiares: es más habitual sufrir esta patología si los familiares también lo han presentado, principalmente, los de primer grado (los padres).
- Obesidad: sufrir sobrepeso genera un exceso de presión sobre el territorio vascular dando lugar a su dilatación, cuando es sobre las venas pequeñas son varículas y en los vasos grandes da lugar a varices.
- Uso de anticonceptivos orales y corticoides: estos fármacos segregan sustancias vasoactivas que provocan formación de nuevas ramas en los vasos sanguíneos .
- Embarazo: compromete el retorno venoso, por ello los vasos pueden sobrecargase y dilatarse.
- Permanecer mucho tiempo de pie o sentado: al igual que en alguno de los casos anteriores empeora el retorno venoso.
- Sedentarismo, la falta de ejercicio puede conducir a estasis venosa. Al realizar ejercicio, la musculatura de los miembros inferiores se hace más potente y favorece el adecuado funcionamiento de las venas, evitando varices y otras alteraciones vasculares.
- Uso de ropa muy ajustada: produce mal funcionamiento circulatorio por la presión.
- Traumatismos directos: directamente pueden dilatar o romper pequeños vasos sanguíneos.
El diagnóstico es sencillo para un médico, por lo general se realiza tras valoración directa de la piel, puede hacerlo tanto un dermatólogo como un médico especialista vascular. En ocasiones se puede solicitar una ecografía para valorar el alcance de las lesiones.
¿Pueden eliminarse las telangiectasias en el rostro? técnicas para su reducción
En el tratamiento se buscan fundamentalmente fines estéticos, ya que estas lesiones son benignas. Los tratamientos más recomendados son:
- Camuflaje: es tan fácil como la utilización de maquillaje con suficiente cobertura para disimular las lesiones vasculares. Es una opción sencilla, económica y sin ningún tipo de contraindicación. Hay que tener en cuenta que se debe aplicar a diario.
- Electrocoagulación: consiste en la aplicación de ondas de alta frecuencia, a través de finas agujas, capaces de convertirse en calor. Gracias a ese calor se consiguen coagular los vasos sanguíneos sin complicaciones. Es especialmente útil en las lesiones vasculares superficiales de coloración roja de calibre fino. Esta opción es simple y económica.
- Esclerosis con láser: se lleva a cabo mediante el Láser Neod-YAG, que se basa en la eliminación o bloqueo del paso de sangre por los vasos alterados.
Es una técnica de precio bajo, que se puede repetir en múltiples ocasiones. Además, es un procedimiento muy seguro que se puede compatibilizar con la depilación láser. - Luz pulsada: se realiza con la utilización de un láser, es capaz de destruir algunos pequeños vasos con la aplicación de luz pulsada que se transforma en calor. Los resultados son muy positivos e inmediatos. Además, aportan mejoría del aspecto y densidad cutánea.
Como hemos analizado, las telangiectasias en la cara son lesiones vasculares benignas muy frecuentes (más en las mujeres) que presentan diferentes factores predisponentes (algunos reversibles y otros no) que en muchas ocasiones solicitan tratamiento. Los resultados tras el tratamiento son muy satisfactorios, pero es interesante controlar aquellas causas que puedan provocar la aparición de nuevas lesiones.